Quien se encuentre a gusto con sus gafas nunca querrá dejar de usarlas, pasa lo mismo con los niños y pasa lo mismo con los adolescentes, que nunca las dejaran tiradas u olvidadas si realmente sienten que están identificados con ellas.
Los lentes forman parte del cómo se ven, son esenciales para la imagen que proyectan y no son solo un objeto para la comodidad visual de quien lo usa, pues también cumplen una función importante en lo que se refiere a la expresión personal.
En este artículo encontrarás una serie de recomendaciones con respecto a qué armazones comprar para niños y adolescentes, que destaquen con ellos y además cuidarán de su salud.
Combinar la Forma del Rostro con la Forma de las Gafas.
Si quieres que los lentes se vean bien, hay que buscar que se compenetren bien con el rostro de quien los usa, por lo que hay que procurar que estos guarden cierta combinación con la forma de la cara.
Siendo el rostro alargado, con la frente y la mandíbula estrecha, se puede buscar un armazón horizontalmente amplio que bien podría llevar decoraciones en la parte superior, de manera tal que ensanche la cara.
Si al contrario de alargado el rostro es cuadrado, con la frente ancha y la mandíbula esquinada, se pueden intentar armazones redondos que suavicen las formas angulosas del rostro.
Para los rostros con formas de diamante, aquellos que tienen los pómulos pronunciados y muy marcados, mientras que la frente y la mandíbula son un poco estrechas, una buena opción serían los armazones estilo mariposa que tienen a resaltar aún más los pómulos con sus formas ovaladas.
Mientras que los rostros ovalados, aquellos que se caracterizan porque ningún rasgo predominante, y cuyos pómulos se inclinan a ser estrechos, es recomendable usar armazones con formas geométricas que añadan ángulos a la cara.
Y por último, si el rostro es redondo, siendo su principal característica la anchura de unos pómulos que nunca se marcan, lo ideal sería usar armazones con formas cuadradas y rectangulares que sin embargo no sean rectos ni tengan filos, sino que más bien mantengan curvas .
Bisagras de Resorte Flexible
Algo que describe a la juventud es la actividad física. Durante esos años se tiende a ser más enérgico y se suele estar siempre en constante movimiento, razón por la cual es más probable que ocurran accidentes en los cuales se vean comprometidas las gafas.
Una de las partes que se pueden ver más afectadas en lo que respecta al armazón son las bisagras que doblegan las patillas. Un ligero golpe bien localizado puede forzar la bisagra para terminar rompiéndola.
Para evitar entonces reparaciones costosas y ajustes frecuentes, merece la pena adelantarse para hacerse con un armazón que contenga bisagras de resorte, estas aumentan el rango de flexibilidad de las patillas.
Un Material Saludable
Existe la posibilidad de que algunos materiales con los que estén hechos los armazones resulten ser molestos para algunos niños y adolescentes, y hasta puede que les causen alergias; para evitar llevarse una mala experiencia lo mejor es preocuparse por conseguir uno que sea hipoalergénico.
Asimismo también el peso es un factor a tener en cuenta pues según que material se utilice las gafas pueden llegar a ser más pesadas y por lo tanto más incómodas y peligrosas de usar, ya que por su propio peso dependiendo del ángulo en que se mueva la cara estas pueden salir despedidas directo hacia el suelo.
Una alternativa es usar una correa plástica que se una a las patillas del armazón, a manera de colocarse los lentes alrededor de la cabeza cual si fueran las gafas un collar. Otra opción es usar lentes con patillas especiales que se sujetan de una forma más ergonómica a las orejas.
Es recomendable atender al material que usa el armazón para que este sea liviano, duradero e hipoalergénico. Por dar un buen ejemplo, el titanio es un material que reúne estas características.
Los Cristales
Por último, y no por eso menos importante, hay que pensar en el cómo los cristales se verán afectados por la montura que se vaya a escoger, del mismo modo hay que tener en cuenta el uso que le daremos a las gafas.
No es lo mismo un armazón para lentes de sol que un armazón para unas gafas de lectura, hay que escoger el estilo propio para el modo en que se usarán los lentes, un armazón multicolor para un adolecente puede funcionar muy bien en la calle pero traerle problemas en el colegio.
La clave para alcanzar conseguir las gafas perfectas está en evitar que estas generen a futuro cualquier tipo de problemas, en consecuencia aconsejamos buscar el asesoramiento directo de los agentes de venta de las ópticas.